He leído un artículo interesante sobre las ideas de Henry Giroux que habla sobre la formación de una ciudadanía democrática y qué factores están implicados en dicho proceso.
El individuo se va desarrollando a partir de sus experiencias del día a día en diferentes lugares, uno de ellos es la escuela.
Distinguimos distintos tipos de ciudadanía:
.-Ciudadanía pasiva, significa que no se ejercen los derechos ni se cumplen los deberes de forma activa. En este contexto, las personas aceptan de manera resignada y sumisa el ordenamiento social e institucional, incluso si este viola derechos fundamentales o impide el desarrollo de capacidades básicas de los ciudadanos. En lugar de cuestionar y desafiar estas situaciones, se naturalizan y se aceptan como parte de la vida cotidiana.
.- Y dos tipos de ciudadanía activa:
- Ciudadanía activa en el ejercicio de sus derechos, pero pasiva en sus responsabilidades hacia el interés público, las personas están enfocadas en defender sus intereses individuales, pero no se involucran de manera activa en el bien común.
- Ciudadanía activa en términos de derechos y responsabilidades, se manifiesta en prácticas de vigilancia y control ante las acciones del Estado y del mercado, y en acciones responsables orientadas al bienestar público. Esta ciudadanía reconoce que sus derechos se ejercen en el ámbito público, donde se reúnen todas las personas que defienden el bien común y el interés general. En lugar de centrarse únicamente en sus intereses individuales, esta ciudadanía está comprometida con el bienestar colectivo y actúa en consecuencia, utilizando su poder y recursos para promover un cambio positivo en la sociedad.
Hemos de destacar que la que predomina actualmente es la pasiva y si queremos que esto cambie a una población más activa, crítica y comprensiva, debemos inculcar estos valores en la etapa de formación de las personas, es decir, en la escuela.
Si bien el proceso de socialización empieza en la infancia junto a la familia, es en los centros educativos donde el individuo termina de desarrollarse, son lugares de formación tanto profesional como personal.
Es nuestra responsabilidad como futuros docentes tomar la iniciativa y proponer nuevos retos a los alumnos, que faciliten la adquisición de habilidades como la empatía, el sentido crítico, la equidad y la justicia, en pos de formar una mejor sociedad.
Lucía Rosales De Marco
Alumna de Magisterio de Educación Primaria 2ºA
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