martes, 11 de octubre de 2022

7 OCT. DÍA DE LA SONRISA- Cinco maneras de contribuir a crear una sociedad mejor


 

Cinco maneras de contribuir a crear una sociedad mejor



Nuestra sociedad necesita más alegría. Cada día, ponemos el telediario y nos invaden las malas noticias: violencia, cambio climático, crisis, pobreza… Esto nos deja una sensación de malestar que, con frecuencia, nos lleva a apagar la televisión. Sin embargo, girar la cara e ignorarlo no resuelve los problemas. Y por el contrario, seguro que algo, por poco que sea, podríamos mejorar si, como ciudadanos, nos lo propusiéramos seriamente. Algo tan sencillo como sonreír más, sin duda provocaría un efecto positivo en nuestro propio bienestar y en el de quienes nos rodean. 

Con motivo del Día Mundial de la Sonrisa, desde Fundación Lealtad, entidad que acredita la transparencia y buenas prácticas de las organizaciones no lucrativas, ha identificado cinco sencillas maneras de generar impacto positivo en nuestra sociedad.

SONREÍR MÁS. Mucho se ha hablado ya de los innumerables beneficios de la risa, que es capaz de estimular el corazón, los pulmones y los músculos, de reducir el estrés y de aumentar las endorfinas que se liberan en el cerebro, conocidas como las hormonas de la felicidad. La risa es, además, contagiosa, con lo que es un vehículo que transporta felicidad hacia los demás. 

Pero más allá de la carcajada, sonreír es todavía más sencillo, es parte del lenguaje universal del ser humano, y es muy gratificante. Quien sonríe regala bienestar. Con una sonrisa transmitimos nuestro apoyo a otra persona, le damos confianza y mejoramos su autoestima. Regalar una sonrisa en el ascensor, en el metro, al llegar a trabajar, puede alegrar el día a alguien. Al pagar en una tienda o en un bar, haremos sentir a la persona que está al otro lado que su trabajo merece la pena.

AMABILIDAD Y EDUCACIÓN. En realidad, tiene mucho que ver con el punto anterior. Saludar, dar las gracias, pedir las cosas por favor… y hacerlo mirando a la persona a quien nos dirigimos. Estas cosas, que toda la vida se han enseñado a los niños como una parte fundamental de su educación, parece que muchas veces se nos olvidan cuando llegamos a la edad adulta. Los demás no tienen la culpa de que hayamos tenido un mal día en el trabajo, o de que tengamos un problema en casa. Pero tendemos a ensimismarnos, generando a nuestro alrededor un círculo de malas vibraciones.

Por el contrario, pequeños gestos de amabilidad como preguntar al compañero de trabajo por su familiar enfermo, desearle al frutero que pase un buen fin de semana, decirle a tu pareja que le sienta muy bien esa camisa nueva, o al cocinero que estaba deliciosa la comida que ha preparado, son formas de hacer sentir bien a las personas, y por muy poco. Y si además se dice con una sonrisa, el efecto se multiplica.

COMUNIDADES DE PROXIMIDAD. El ritmo que llevamos y el estilo de vida actual han hecho que nos “desenchufemos” de nuestros vecinos. Se han perdido esas relaciones de antaño, cuando cada portal era como una gran familia, cuando había vida de barrio y todo el mundo se conocía. La era tecnológica es también la era del individualismo. Es tiempo de recuperar esa vida vecinal, de crear comunidades de proximidad en las que cada uno pueda aportar algo positivo a alguien que lo necesita.

La pandemia recuperó ese espíritu vecinal en algunos lugares. De repente, el joven se acordaba de la persona mayor que vivía sola en su portal y no podía salir a la calle, y se ofrecía a traerle la compra, y de paso charlaba un poco con ella. Basta eso para hacer sentir mejor a una persona mayor. También la tecnología está ayudando a organizar redes de proximidad, en las que es posible conectar con otros vecinos del barrio para ayudarse con lo que cada uno sabe hacer, ofrecer compañía y, por qué no, también diversión y distracción.

CONSUMO CONSCIENTE. El planeta también necesita ayuda. Y hay mucho que hacer. Los gobiernos, las empresas, tienen la obligación de tomar medidas para reducir el impacto ambiental y contribuir a frenar el cambio climático. Pero nosotros, como ciudadanos, tenemos una gran responsabilidad. Las pequeñas decisiones del día a día tienen un impacto mucho más grande de lo que pensamos en el entorno, y está en nuestra mano que ese impacto sea positivo o negativo.

Por ejemplo, a la hora de hacer la compra, podemos descartar los plásticos de un solo uso, incluidos los envoltorios. Si se nos estropea un aparato eléctrico o electrónico, podemos intentar repararlo antes que directamente sustituirlo y convertirlo en basura tecnológica. En casa, debemos concienciarnos de la importancia de reciclar todo lo posible (vidrio, envases, papel, pilas, cápsulas de café, aceite usado…). No malgastar el agua ni la energía no solo será bueno para nuestro bolsillo, también será responsable con el planeta. Evitar el coche particular cuando es posible ir andando, en bici o en transporte público ayudará a reducir las emisiones contaminantes… El abanico de posibilidades es amplio, la clave está en tomar conciencia de nuestro papel.

VOLUNTARIADO Y DONACIONES. A veces, queremos hacer algo por los demás pero no sabemos por dónde empezar. O tenemos la sensación de que poco podemos hacer por nuestra cuenta. Por suerte, en el tercer sector existen cientos de iniciativas en las que podemos colaborar. Puede ser a través de un voluntariado activo, regalando nuestro tiempo a otras personas o causas, o mediante donaciones de dinero o de bienes materiales que servirán para prestar servicios básicos a colectivos que lo necesitan.

En este punto, antes de elegir la ONG con la que vamos a colaborar, es fundamental asegurarse de que cumple con unos estándares de transparencia y buenas prácticas, para estar tranquilos de que dará un buen uso a esos fondos. El tercer sector es un pilar básico para la sociedad, pues muchas veces llega donde las administraciones no llegan. Su papel es imprescindible, como se ha demostrado recientemente en crisis como la de Ucrania o durante la pandemia. Por eso, apoyar a estas  organizaciones es una forma clara de contribuir a construir un mundo mejor.

No parece muy complicado… ¿Cuándo empezamos?




Contacto de prensa - COMBOCA

María Rodríguez
maria.rodriguez@comboca.es 
Pablo Martín
pablo@comboca.es 



JERO GARCÍA EN LA UNIVERSIDAD DE CASTILLA LA-MANCHA: “CAERSE Y VOLVERSE A LEVANTAR PARA SEGUIR APRENDIENDO”

El jueves 6 de octubre, fue un día especial para la Universidad y en particular para los alumnos de la Facultad de Educación de Toledo. Jero García nos visitó y pasó toda la jornada con nosotros.

Por la mañana tuvo un encuentro con más de 350 alumnos, cautivó con su cercanía, sus palabras y sobre todo, con el relato de su vida: nacido en Carabanchel en épocas donde la droga estaba muy presente, padre muy joven, eligió el boxeo para huir de los ambientes conflictivos. Nos habló de la necesidad de incorporar y gestionar el miedo dentro de nuestra vida y entender que los problemas, dificultades o caídas forman parte del proceso. Dentro de su vida profesional llegó a ser campeón de España utilizando los cinco superpoderes que todos tenemos: constancia, sacrificio, disciplina, motivación y pertenencia al grupo. Animó a los futuros docentes a trabajar estos valores a nivel personal y dentro del aula. Nos contó como él fue acosador sin ser consciente de ello y como una experiencia traumática le llevo a crear la Fundación Jero García para ayudar a la integración a través del deporte, becando y entrenando a niños en riesgo de exclusión o con problemas de conducta. También trabaja con chicos y chicas con parálisis cerebral y síndrome de Asperger, víctimas de bullying, de abusos sexuales y de violencia de género, y está volcado en distintas causas solidarias, haciendo hincapié en la necesidad de llevar a las escuelas la inteligencia emocional, la escucha y la observación constante del docente para descubrir situaciones de bullying.
 

Fueron muchos los consejos, pautas, anécdotas y preguntas que se escucharon durante la ponencia, incluso, como no podía ser de otro modo, nos contó como fue la realidad del programa televisivo “Hermano Mayor” que él presentaba. Terminó con una gran frase: “los verdaderos héroes no están en la tele, los tenéis mucho más cerca: la familia, los amigos, los profesores y los profesionales. No dudéis en pedir ayuda si lo necesitáis, entonces sí seréis valientes”.

 

 

Por la tarde, a las 18,00 h., Jero tuvo un encuentro con las familias, ya que era el principal objetivo de su visita, pues gracias al convenio firmado con el Ayuntamiento de Toledo, y dentro de las actividades programadas del proyecto “Escuela de Familias”, pudimos disfrutar de su presencia. Tuvimos la suerte de que nos acompañara Teo, concejal de educación, cultura y deporte.

Tenemos que agradecer la gran labor que hicieron un grupo de alumnos y alumnas de 2º de Grado de Educación Primaria, pues mientras los padres y madres disfrutaban de la ponencia, ellos prepararon multitud de actividades para entretener y educar a los cerca de 100 niños que acompañaron a sus padres. Todo estuvo muy bien organizado: recibían a los niños, les ponían una pegatina con su nombre y con el número de teléfono del papi o mami que estaba en la conferencia y los acompañaban para que eligieran algunas de las actividades programadas. Se lo pasaron genial, aprendieron un montón de cosas, no hubo ninguna llamada telefónica y después de casi dos horas, cada niño marchó con su familia. Por último, las instalaciones utilizadas quedaron absolutamente recogidas. Bravo por vosotros, eso si es una magnífica práctica. 

Dentro de Envases de Cartón, Jero emocionó a los padres, les comentó que él tiene déficit de atención con hiperactividad, que fue un niño difícil y que hoy en día los chicos y chicas están emocionalmente “muy tocados”, los animó a seguir educando, a no desfallecer, a caer, caer y no tirar la toalla, porque los hijos necesitan saber que estamos ahí como padres, necesitan saber que nos importa lo que hacen. Habló de educar la tolerancia a la frustración, las normas, las responsabilidades en casa, las consecuencias de sus actos y la forma en que tenemos que dirigirnos a ellos.

La parte de las preguntas fue emotiva, pues algunos padres contaron la situación extrema por la que están pasando, lloraron de impotencia y de no saber qué hacer, otros compartieron sus inseguridades y otros dieron las gracias por este tipo de eventos que les ayuda y les consuela.

Fue un día intenso. Y si tuviera que definir a Jero, diría que es un hombre rudo pero emotivo, con multitud de cicatrices, pero con la necesidad de curar las de los demás, cercano, maestro, padre, amigo y que viene a convencernos de que todos tenemos un superpoder: El poder de querer intentarlo. Gracias Jero.


Y gracias a las familias que se acercaron a nuestra Universidad para seguir aprendiendo, es una pena que sobraran asientos……pero la experiencia mereció la pena y si conseguimos el sosiego de alguna familia, pues objetivo conseguido. 

Buenas tardes, solo quería felicitarles por la conferencia de ayer. Me encantó la charla, fue enriquecedora, educativa, amena y hasta divertida. Y felicitarles por la organización, mis hijas se lo pasaron genial. Yo estuve hora y media que miraba el teléfono pensando me van a llamar...y cuando fui a recogerlas estaban divirtiéndose. ¡Por lo tanto, la organización un 10!!

Buenos días, Puri. Simplemente agradecer estas iniciativas que siempre son enriquecedoras y, como ya señaló una de las personas que asistió a la conferencia, nos sirve de gran ayuda para replantearnos las cosas y cambiar la forma de actuar con nosotros mismos y hacia nuestros hijos. Sin ir más lejos, ayer puse en práctica otra forma de dirigirme a ellos, intentando ponerme en su lugar y valorándoles las cosas.

Gracias por hacer este tipo de eventos.

Gracias a vosotros, a todos los que habéis participado de esta gran aventura.

                                                                                   Purificación Cruz Cruz