Lázaro y Asensi (1989) definen la tutoría como la actividad inherente a la funcionalidad del maestro que se hace personal y colectivamente con los estudiantes de un grupo-clase con el propósito de facilitar la adhesión personal en los procesos de aprendizaje. Todo maestro, haya sido destinado o no como tutor de un conjunto de estudiantes, lleva a cabo en el ejercicio de sus funcionalidades un grupo de ocupaciones y labores encaminadas a promover el desarrollo personal y social del alumnado, que tenemos la posibilidad de conceptualizar como acción tutorial. La acción tutorial está íntimamente ligada a la orientación, y las dos son parte del núcleo de la actividad profesor. La orientación, que es más extensa que la acción tutorial y la engloba, dispone de un doble canal para su desarrollo:
- Las ocupaciones que se conducen a cabo a partir de las superficies, materias o módulos, como parte de la tarea instruccional y formativa del profesorado, y que ofrecen sentido a la iniciativa de que todo instructor o instructora es además tutor o tutora, y, por consiguiente, que la tutoría pertenece a la funcionalidad profesor.
Sin embargo, las situaciones e inconvenientes que tienen la posibilidad de encarar a partir de la acción tutorial tienen más grande dificultad y son más inesperados que...
Esto implica para el profesorado una concepción más extensa de la funcionalidad profesor, una reacción abierta y el dominio de los registros expertos necesarios para ofrecer contestación a la dificultad que implica el comprender la acción tutorial como una actuación educativa que desempeña todo los equipamientos maestro, a partir de sus diferentes papeles expertos, dirigida al grupo del alumnado, y que necesita de una actuación coordinada.
- La toma de elecciones particulares de manera consciente y responsable.
- Hacer el seguimiento personalizado del proceso de aprendizaje y desarrollo integral de los alumnos/as.
- Facilitar la toma de elecciones respecto al futuro académico y profesional de los alumnos/as.
- Preventiva, ha de atender a todo el alumnado a partir de su ingreso en el centro, favoreciendo la cohesión del grupo-clase, lo cual previene inconvenientes de disciplina, optimización el rendimiento y beneficia la maduración social del alumno/a.
- Que tenga presente y atienda a la variedad del alumnado, con sus diferentes ritmos y estilos de aprendizaje, intereses, valores,
expectativas…)
- Que trabaje la toma de elecciones como un proceso, ayudando al alumnado en la averiguación, estudio y valoración de la información, para aprender a tomar elecciones según con sus valores e intereses individuales.
- Debería considerarse como un proceso que tiene que ser constante y ofertarse al alumno/a durante su escolaridad; debería atender a las propiedades particulares de cada alumno/a; y debería promover la toma de elecciones causantes del propio estudiante sobre su futuro académico y profesional, capacitándolo para su auto orientación.
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Marta Ballesteros González
2º Magisterio Primaria
Marta.ballesteros3@alu.uclm.es
Fuente: www.pedagogiamagna.com
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