Revista Digital El Recreo: El Acoso

martes, 11 de junio de 2019

El Acoso

Según la RAE lo define como acción y efecto de acosar, distinguiendo diversos tipos de acoso.

Acoso escolar: 1. m. En centros de enseñanza, acoso que uno o varios alumnos ejercen sobre otro con el fin de denigrarlo y vejarlo ante los demás.

Acoso laboral:

1. m. Práctica ejercida en el ámbito del trabajo y consistente en someter a un empleado a presiónpsicológica para provocar su

marginación.

Acoso moral:

1. m. acoso psicológico.

Acoso psicológico:

Tb. ~ sicológico.

1. m. Práctica ejercida en las relaciones personales, consistente en dispensar un trato vejatorio y descalificador a una persona con el fin de desestabilizarla

psíquicamente.

Acoso sexual

1. m. acoso que tiene por objeto obtener los favores sexuales de una persona cuando quien lo realiza abusa de su posición de superioridad sobre quien lo sufre.

Acoso sicológico: psicológico.

Centrándome en el acoso escolar, encontramos multitud de casos en nuestros centros, desde edades tempranas como en la Educación Primaria hasta edades más avanzadas como en Educación Secundaria y en adelante.

Siguiendo la noticia del periódico 20 minutos publicada el 10 de enero de 2019, anuncia que en Castilla – La Mancha se ha registrado 373 casos de acoso escolar entre 2012 y 2017 entre la guardia civil, la policía local y la policía nacional, siendo en el año 2012 un total de 69 casos, 61 en el años 2013, 64 en el año 2014, 80 en el año 2015, 54 en el año 2016 y 45 en el años 2017.

Todo esto parece ficticio, ¿verdad? Pero no, es la cruel realidad, 373 casos en 5 años dados en una sola comunidad autónoma. Y…. entonces es cuando yo me planteo, ¿qué protocolo de actuación, de prevención, se está llevando a cabo en los centros de esta comunidad? No podemos permitirnos tener estas cifras tan altas y menos en edades tan inferiores.

El equipo docente junto con el equipo directivo deben de poner en marcha otras medidas para bajar e incluso eliminar estas cifras.

Otra de las preguntas que repito en mi mente constantemente es ¿qué tipo de valores, de educación, de mentalidad, se les inculca en sus hogares? No sé si toda la culpa recae en las familias, pero creo que quien mejor conoce a sus hijos con ellos, son quienes pasan el día a día con ellos y quienes les han educado e inculcado una serie de valores. Considero que mediante una observación profunda y detenida, los padres pueden conocer cómo actúan sus hijos en determinadas situaciones. En este caso la que más nos interesa es el contacto con sus iguales. De este modo, cuando se realice una comida familiar, un cumpleaños… sean los padres quien observen a sus hijos y así conozcan su modo operandi y saber si actúa del mismo modo o no en clase que en otros contextos.

Estando en pleno siglo XXI, nos encontramos con miles de avances sobre todo en la tecnología, pero… ¿por qué aún no tenemos un plan para parar esta desgracia?

Solo espero que según vayan avanzando los años, estas cifras sean cada vez más bajas.

Dejando un poco de lado las cifras que nos rodean, me gustaría empatizar con la persona acosadora, meterme en su mente para saber que le lleva a actuar de tal manera, porque claramente todo esto tendrá su explicación.

Yo reflexiono y digo, ¿qué ha pasado por su vida para ser capaz de hacer daño a otras personas, qué situaciones tienen en casa, si es una familia con o sin problemas, cómo se siente antes y después de realizar la agresión?

No conozco a ninguna persona que haya sido agresor, pero si que me hubiese gustado ponerle una respuesta a todas esas preguntas, sobre todo para entenderlo y comprender la situación.

No sin menos importancia, me gustaría conocer como una persona acosada ha vivido toda esa etapa terrorífica, preguntándole ¿cómo se sentía cuando se levantaba?, ¿si tenía ilusiones por algo o alguien que le ayudaban a seguir hacia delante?, ¿si sus padres tenían conocimiento alguno sobre lo que estaba pasando....?

Por suerte o por desgracia nunca he cumplido ninguno de los dos roles para saber como se vive esa situación, pero lo que si tengo claro es que nunca me gustaría vivirla pero ni yo ni ninguna persona más. ¡ACABEMOS CON EL ACOSO!