martes, 7 de mayo de 2024

“Una enseñanza basada en proyectos está huérfana sin estudios clásicos”


Podemos apreciar que el siguiente titular nos desprende mucha información: “Una enseñanza basada en proyectos está huérfana sin estudios clásicos”.

Se puede dar por hecho que la noticia hablará de la metodología basada en proyectos, mostrada en el currículo vigente, y sobre los estudios clásicos que todos los alumnos deben de poseer.

Con la implantación de la LOMLOE, también conocida como “ley Celaá”, en uno de los artículos de la ley de educación, concretamente en el 19.4, se afirma que “con objeto de fomentar la integración de las competencias, se dedicara un tiempo del horario lectivo a la realización de proyectos significativos para el alumnado y a la resolución colaborativa de problemas reforzando la autoestima, loa autonomía, la reflexión y la responsabilidad”. La nueva ley incluye el trabajo por proyectos, metodología que intenta promover el apropiamiento del aprendizaje de los estudiantes mediante la elaboración de “proyectos en equipo”. Algunos autores afirman que la metodología no es automática ni esta garantizada, sino que esta ligada a unos factores de liderazgo, etc.

La presente practica se centra en el análisis de una noticia educativa y su posterior análisis sociológico.

Esta metodología, se ha implantado en el currículo, pero muchos profesores llevan usándola tiempo, sin la necesidad de que tenga que dictarlo una ley. El origen del ABP se remonta a mediados del siglo XIX, en entornos universitarios. Podemos destacar a John Dewey como uno de los primeros defensores de este método de enseñanza.

Se han estudiado los efectos que tiene en los estudiantes el ABP, y muchos maestros afirman que tiene unos resultados medios en comparación con los métodos tradicionales; además de que, en muchas aulas, esta metodología no se está aplicando de manera correcta. Para que el ABP funcione, se necesitan conocimientos sólidos previos, los cuales carecen en primaria debido al nivel educativo. Como futuros docentes, debemos de replantearnos si este método sería eficaz en alumnos de primaria o sería más beneficioso llevar a cabo su aplicación en aulas de secundaria.

Si no poseemos una base previa de conocimientos, la metodología del ABP, no funciona. No podemos implantar nuevos métodos si la mayoría de los profesores que se encuentran en las aulas no saben cómo usarlos.

Tras haber leído la noticia, las repercusiones que tiene en la sociedad el tema tratado, pienso que el ABP es una gran metodología que podemos usar para afianzar los conocimientos que posee el alumnado de manera diferente. Si desde pequeños hemos usado buenas metodologías para afianzar los conocimientos, en el futuro, la tasa de abandono escolar, por ejemplo, podría verse reducida. No podemos empezar a decorar una casa si todavía no tenemos el terreno en donde se asentará. Muchos maestros han estado usando estos métodos de enseñanza-aprendizaje durante toda su carrera profesional, y ahora que “está de moda” muchos otros los están comenzando a usar. Seamos conscientes de lo útiles que son y las ventajas que nos pueden ofrecer, y no dejemos pasar las oportunidades de usarlos en el aula.


BIBLIOGRAFÍA

Cordellat, A., Cordellat, A., & Cordellat, A. (2024, 10 marzo). Una enseñanza basada en proyectos está huérfana sin estudios clásicos. El Paíshttps://elpais.com/extra/colegios/2024-03-10/una-ensenanza-basada-en-proyectos-esta-huerfana-sin-estudios-clasicos.html

Ley Orgánica 3/2020, de 29 de diciembre, por la que se modifica la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación. Boletín Oficial del Estado, 340, de 30 de diciembre de 2020, 122868-122953 https://www.boe.es/boe/dias/2020/12/30/pdfs/BOE-A-2020-17264.pdf


Lucía Martín-Benito Cano.

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