SE CONSIDERA URGENTE CUALIFICAR A LOS PROFESIONALES DE LA EDUCACIÓN EN EL DESARROLLO DE LAS COMPETENCIAS DIGITALES NECESARIAS PARA LA DOCENCIA.
En las últimas ediciones del informe Horizon para la Educación Superior (NMC Horizon Report) se identifican las principales tendencias y cambios en la educación universitaria, destacando la integración del aprendizaje en línea, híbrido y colaborativo y la creciente ubicuidad de los medios sociales, el cambio de los estudiantes como consumidores a estudiantes como productores o creadores (prosumidores), el aumento del aprendizaje en línea y la evaluación a través de datos.
En el informe de 2017 se destacan las seis tendencias que generarán impacto: promover la cultura de la innovación desde enfoques más prácticos donde se potencia la creatividad, el aprendizaje profundo (pensamiento crítico + resolución de problemas + colaboración + aprendizaje personalizado), mayor enfoque en las métricas de aprendizaje, rediseño de los espacios de aprendizaje, diseños de aprendizaje mixtos, aprendizaje colaborativo (Adams Becker, y otros, 2017).
“Las Tecnologías de la Información y la Comunicación serán la pieza fundamental para producir el cambio metodológico que lleve a conseguir el objetivo de mejora de la calidad educativa… Las TIC serán también una herramienta clave en la formación del profesorado y en el aprendizaje de los ciudadanos a lo largo de la vida” (Jefatura del Estado, 2013).
En el documento de la UNESCO “Estándares UNESCO de Competencia TIC para Docentes”, figura el propósito de extender este tipo de formación a todos los educadores, tanto en la faceta de alfabetización audiovisual como en la de integración de las TIC en la práctica profesional.
El marco común de competencia digital docente (MECD, 2017) destaca los conocimientos, competencias y habilidades que todo docente debiera promover como imperativo curricular en las áreas siguientes: información, comunicación, creación de contenidos, seguridad y resolución de problemas.
La creación del Programa de Tecnologías de la Sociedad de la Información (TSI) está permitiendo mejorar los procesos de aprendizaje, haciéndolos más interactivos, pedagógicos y accesibles.
Los estudiantes desde esta perspectiva tienen el control de su progreso y la responsabilidad en el proceso de aprendizaje en función de sus necesidades. Los docentes desde este enfoque tienden a observar, guiar, comentar y colaborar en el aprendizaje de los alumnos (Flumerfelt & Green, 2013)
REFERENCIAS
En el informe de 2017 se destacan las seis tendencias que generarán impacto: promover la cultura de la innovación desde enfoques más prácticos donde se potencia la creatividad, el aprendizaje profundo (pensamiento crítico + resolución de problemas + colaboración + aprendizaje personalizado), mayor enfoque en las métricas de aprendizaje, rediseño de los espacios de aprendizaje, diseños de aprendizaje mixtos, aprendizaje colaborativo (Adams Becker, y otros, 2017).
“Las Tecnologías de la Información y la Comunicación serán la pieza fundamental para producir el cambio metodológico que lleve a conseguir el objetivo de mejora de la calidad educativa… Las TIC serán también una herramienta clave en la formación del profesorado y en el aprendizaje de los ciudadanos a lo largo de la vida” (Jefatura del Estado, 2013).
En el documento de la UNESCO “Estándares UNESCO de Competencia TIC para Docentes”, figura el propósito de extender este tipo de formación a todos los educadores, tanto en la faceta de alfabetización audiovisual como en la de integración de las TIC en la práctica profesional.
El marco común de competencia digital docente (MECD, 2017) destaca los conocimientos, competencias y habilidades que todo docente debiera promover como imperativo curricular en las áreas siguientes: información, comunicación, creación de contenidos, seguridad y resolución de problemas.
La creación del Programa de Tecnologías de la Sociedad de la Información (TSI) está permitiendo mejorar los procesos de aprendizaje, haciéndolos más interactivos, pedagógicos y accesibles.
Los estudiantes desde esta perspectiva tienen el control de su progreso y la responsabilidad en el proceso de aprendizaje en función de sus necesidades. Los docentes desde este enfoque tienden a observar, guiar, comentar y colaborar en el aprendizaje de los alumnos (Flumerfelt & Green, 2013)
REFERENCIAS
- Adams Becker, S., Cummins, M., Davis, A., Freeman, A., Hall Giesinger, C., & Ananthanarayanan, V. (2017). NMC Horizon Report: 2017 Higher Education Edition. Austin, Texas: The New Media Consortium.
- Durán Medina, J. F., & Fernández Muñoz, R. (2016). Una mirada digital a la formación inicial de maestros y maestras. En A. Mateos Jiménez, & A. Manzanares Moya, Mejores maestros, mejores educadores (págs. 149-174). Arhidona (Málaga): Aljibe.
- Flumerfelt, S., & Green, G. (2013). Using Lean in the Flipped Classroom for At Risk Students. Educational Technology & Society, I(16), 356-366.
- Jefatura del Estado. (2013). Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa. Madrid: BOE.
- Landeta, A. (. (2007). Buenas Prácticas de e-Learning. San Sebastián: ANCED.
- MECD. (2015). Orden ECD/65/2015, de 21 de enero, por la que se describen las relaciones entre las competencias, los contenidos y los criterios de evaluación de la educación primaria, la educación secundaria obligatoria y el bachillerato. Madrid: BOE.
- MECD. (2017). Marco Común de Competencia Digital Docente. Madrid: INTEF.