"La educación sexual, según la UNESCO, "busca dar a las personas jóvenes el conocimiento, las habilidades, actitudes y valores que necesitan para definir y disfrutar de su sexualidad (física y emocional) individual o en relaciones" (UNESCO, 2010). Del mismo modo, según la OMS (2002) los programas de educación sexual deberían iniciarse tempranamente, ser específicos para cada edad y constituir una actividad continua de promoción de la salud durante los años escolares. Deberían empezar en la familia, con los niños en edad preescolar, y estar en conexión con la escuela." Fundación Sexpol, 2017
Recuerdo cuando era pequeña, con cierto humor, como mis padres, nerviosos, cambiaban de canal cuando en una película aparecía una escena de cama o con cierto erotismo. Yo me ponía muy nerviosa, pues notaba como los adultos me miraban esperando alguna reacción.
Durante mi estancia en la Educación Secundaría, un grupo de padres se negó a que los alumnos participásemos en una serie de seminarios sobre educación sexual. El razonamiento que estos padres alegaba, era que mediante este tipo de actividades, se fomentaba la práctica sexual entre los menores. Por lo que el centro anuló los seminarios. Este hecho ocurrió en dos ocasiones.
Suelo debatir mucho sobre este tema con mis compañeros de clase pues considero que nuestra educación española esta fallando mucho en este aspecto. No solo por parte de la escuela, sino tambien con la forma de educar en casa.
Un cuerpo humano desnudo es algo natural, la sexualización de este, debe ir aparte. Un cuerpo es algo natural y normal, no nos debemos escandalizar, ni alarmarnos, ni ponernos nerviosos. Todos tenemos un cuerpo, cada uno diferente al otro y todos bellos en su forma.
El acto sexual y la sexualidad en general, deben ser presentados de la misma manera desde que los niños son pequeños, pues si desde siempre aprenden a entenderlo y a verlo como es, algo innato en la naturaleza del ser humano, serán capaces de construir sus pensamientos y conocer su cuerpo de una forma mas tutelada por los adultos.
Sin embargo, falsamente creemos que no tratando estos temas y tabulizándolos, salvaguardamos la infancia de los pequeños. La triste realidad es que no es así. Tienen toda esa información, sin filtros ni medidas, a un click de mouse.
Por ello es necesario que eduquemos a las nuevas generaciones de forma que puedan comprender el mundo de una forma más abierta. Considerando todas las tipologías de sexualidad desde el respeto, así como conocerse así mismos.
Son ya muchos los países que ya han incorporado una asignatura de Educación Sexual en los colegios e institutos y son excelentes los resultados.
"Existen recomendaciones de la UNESCO, investigaciones de la OMS, así como estadísticas y recomendaciones europeas, que defienden la necesidad de impartir en los colegios y escuelas educación sexual a niños y niñas. Además, los derechos sexuales se encuentran reconocidos en el derecho fundamental a la vida que está recogido en la Declaración de los Derechos Humanos de 1948.
Al tratarse la sexualidad de un elemento inherente al ser humano, que nace y se desarrolla en nosotros como personas desde nuestro nacimiento y nos acompaña durante toda nuestra vida, no es comprensible la ignorancia que hacia la educación sexual existe por parte del Estado español." Fundación Sexpol, 2017