No cabe duda de que la tecnología ha supuesto un gran avance que ha contribuido a facilitarnos la vida en casi todos los ámbitos. Desde el punto de vista educativo, las TIC nos ofrecen una gran variedad de recursos para apoyar nuestra enseñanza y para hacer nuestras clases más atractivas, incrementando así el interés de los alumnos.
Sin embargo, ¿Dónde está el límite?, un abuso de los aparatos tecnológicos puede desencadenar una gran adicción, convirtiendo, de manera mayoritaria, a los adolescentes, en esclavos de esta.
¿Alguna vez han sentido miedo a salir de casa sin el móvil? ¿No puedes estar sin móvil más de 24 horas? ¿Tienes necesidad de consultar el móvil de forma casi constante? Si la respuesta es sí, es posible que sufras nomofobia.
La nomofobia, se conoce como una gran dependencia a los aparatos móviles, creando un miedo irracional cuando no disponemos de ellos, sin saberlo, casi la mitad de población sufre de este trastorno, afectando más a la población joven.
En relación con esta dependencia, surge otro fenómeno conocido como phubbing, que se refiere al hecho de prestar más atención al móvil que a la persona que nos acompaña, casi todos, hemos provocado o sufrido esta práctica, al menos una vez en nuestra vida.
Desde el ámbito escolar, es importante enseñar a los alumnos a hacer un buen uso de la tecnología, ya que, aunque esta es un recurso excelente para facilitar su aprendizaje, puede derivar en una adicción. Si conseguimos que nuestros alumnos hagan un buen uso de ella, comprenderán que, en ocasiones, los teléfonos móviles, lejos de facilitar la comunicación, nos están privando de ella.
SORAYA INFANTES SESMERO 2ºA.
REFERENCIAS DE LAS IMÁGENES: