La sociedad actual está viviendo lo que podemos denominar "la Era de las nuevas tecnologías". Es evidente que esta forma parte de nuestro día a día y es utilizada por cada uno de nosotros en prácticamente todas las actividades que realizamos.
Es sorprendente la velocidad con la que la tecnología ha pasado a formar parte de nuestras vidas y los cambios que esta ha introducido en ella. Esa misma velocidad o quizás mayor se produce introduciendo cambios en software, apps, hardware, programas informáticos o soportes tecnológicos, que hacen que esta no deje de evolucionar y cambiar.
Como consecuencia de la proliferación de la tecnología en la sociedad actual, hace claramente necesario que esta forme parte también de la formación escolar. Que estén en las aulas y que se enseñe y aprenda con, y de ellas. Pero deberíamos plantearnos una cuestión. ¿La velocidad de cambios en tecnología es la misma que la del Sistema Educativo? Mis dudas surgen teniendo en cuenta que el sistema educativo sigue unos pasos legislativos y sobre todo económicos que condicionan la educación tecnológica en nuestros colegios.
Debido a la velocidad de cambio tan rápida de la tecnología y la velocidad económica tan lenta de nuestro sistema educativo para proporcionarnos herramientas electrónicas o programas y apps, puede hacer que todos estos queden obsoletos al llegar a nuestras aulas limitando así el proceso de enseñanza- aprendizaje de las mismas.
Para minimizar estos posibles problemas se hace fundamental que en nuestros colegios los alumnos/as adquieran la competencia que la legislación educativa denomina "Aprender a Aprender". De este modo, los niños/as adquieren los conocimientos y habilidades necesarias para poder avanzar a la misma velocidad que la tecnología, no quedando limitados u obsoletos por otras causas.
Carmen García Navarro
2º B Magisterio de Primaria