Como alumna de la Facultad de Educación de Toledo, en mis tres años de Diplomatura, al igual que todos mis compañeros, tengo bastantes aportaciones de esta Facultad, o eso espero que las tengan todos, al menos yo sí.
Han sido tres años duros, en lo que a estudios se refiere, ya que tengo que mencionar, que aunque se piense que la carrera es bastante sencilla, en ocasiones no es así y tiene más complicaciones de las que parece, aunque con esfuerzo todo se consigue.
Parece que era ayer cuando llegamos a la sala donde nos reunieron por primera vez, Envases de cartón.
Cómo estaba y cómo está ahora, quienes lo hemos conocido antes y después, las emociones que llevábamos ese primer día y no sabíamos cómo nos iba a ir en nuestra carrera y si habíamos acertado o no en la decisión tomada. Es ahora cuando pasamos por allí sin miedo, pero aquellos primeros días fueron duros.
Hablando desde la experiencia personal, yo sentí gran miedo, además que en ese momento se te vienen bastantes cosas a la cabeza, cosas que te han contado que pueden suceder en la Universidad.
Te piensas que todo lo malo te va suceder, sin embargo según van avanzando los días poco a poco, los caminos se van abriendo y cada día llegas con más ilusión, incluso hay días que tienes ganas de hacer algo con tus compañeros, cosa que dudabas. Quien te ha visto y quién te ve, como en el caso de tus padres, que a los comienzos no querías ir a Toledo ni loca y ahora te gusta, incluso cuentas cosas que has hecho allí.
La propia ciudad de Toledo, aunque a los comienzos cuesta, poco a poco, o bueno como en mi caso necesitas unos dos años para que te guste. Esas cuestas que tan poco nos gustan a todos, incluso no entiendes como la gente puede estar viviendo aquí, con lo bien que estás en tu ciudad, todo llanito y bien, aunque luego tú, sin darte cuenta cuando sales de fiesta caminas lo que todos los que viven en Toledo en toda la semana caminan. Una de las cosas que menos entiendes de la ciudad de Toledo, es que haya tan pocos autobuses y que sean tan impuntuales, por lo que muchas veces decides ir andando, por no esperar.
Pero poco a poco todo pasa.
Volviendo a la Universidad, también en ella todo te parece que está lejísimos, vivas donde vivas te pilla lejos, que pereza ir cuando hace frío y menos como vas a ir a hablar con un profesor con lo lejos que está, para que vayas y no te pueda atender, ni pensarlo, pues eso te puede pasar, aunque sin darte cuenta poco a poco, te parece una distancia normal. Hasta normal te puede llegar a parecer si te coges un trabajo que te ofrece la Universidad, como el de encuestadora, que te recorres todos los días hasta el último punto de la Universidad, para poder hacer todas las encuestas y ganarte un sueldo extra.
De mi experiencia como encuestadora me he llevado buenas experiencias, ya que he conocido a bastante gente y he conocido algunos profesores más aún si cabe.
Siendo este mi último año de carrera aprovecho la ocasión para tratar de recordar todos los momentos vividos en ella, ya que han sido tantos, no solamente me quedo con las clases, ya que en ella he vivido experiencias buenas como aprobados, también suspensos, risas con mis compañeros, participaciones, exposiciones que me han permitido quitarme el miedo escénico, conocer a bastantes profesores y gracias a ellos además de formarme, han conseguido incluso cambiar en mí algunos ideales que yo tenía de mi carrera profesional y que no eran el mejor camino e incluso me han permitido cambiar algunas de mis metas personales, pero sobre todo tener una ilusión por saber más.
Cuando vienes a la Universidad te piensas que sabes, sin embargo te das cuenta que sabe la gente más que tú, cosa que te gusta, como en mi caso relacionarte con gente que sepa más y de la que puedas aprender. Siempre es bueno saber más.
Los tres años hay veces que dices: "deseo ya acabar ya de una vez por todas", sin embargo otras veces cuando ya ha pasado todo, te alegras de todo lo que has hecho y de que realmente ha merecido la pena.
He conocido profesores comprensivos, impacientes, responsables, cercanos, otros no tanto, profesores que entran en clase y se olvidan de todo, solo se basan en que tu aprendas…
Aunque la verdad que tengo que decir que todos se han preocupado por conocernos, no hemos sido un código, ni un número, ni mucho menos, sino una persona la cual se la intentaba explotar al máximo todas sus posibilidades.
Ha sido un lugar bastante cercano , con algunos recursos un poco escasos, en el caso de las salas de ordenadores, o las salas de grupo que hemos luchado como unos locos por conseguir tenerlas todos, pero no siempre ha sido así. Pero poco a poco confío en que se irá mejorando todo, como todas las cosas que pasan en la vida que mejoran poco a poco, ya que si se hace todo de una vez, tampoco es bueno.
A nuestra llegada a la Universidad, parecía un descampado, sin alumbrado, sin puerta de entrada casi y ahora ya vemos como ha mejorado, como les sucederá a los compañeros que ahora acaban de comenzar y que irán comprobando poco a poco como mejoran las cosas, de lo que yo doy fe que sucederá.
Espero que a mis compañeros de Grado, les vaya tan bien como me ha ido a mí en mi carrera, y así sucederá.
No tengo la menor duda, de que aunque pasen los años, en mi mente los años en esta Universidad tendrán un lugar, imborrables las experiencias vividas con mis compañeros en ocasiones buenas en otras no tan buenas, ya que a la hora de trabajar todos nos hemos sacado de quicio mutuamente, pero sin duda, unos años imborrables y llenos de recuerdos.
Sin más dar las gracias a todos los que han contribuido a mi formación profesional y personal. Gracias a mi profesor Ricardo por haberme ofrecido la oportunidad de poder expresar mis experiencias y mis vivencias.
Sin más, una alumna de la Universidad de la promoción 2008-2011 y deseosa de Graduarse.
ESPERANZA ACUÑA RUFO