LOS MENORES Y LAS REDES SOCIALES

A día de hoy, tenemos muy normalizado ver a un menor con un dispositivo móvil en sus manos, pero ¿cuál es el motivo de su uso? La adicción de los menores a las redes sociales es un tema preocupante en la sociedad actual. Las redes sociales son una herramienta poderosa que ha transformado la forma en que las personas se comunican, comparten información y se relacionan entre sí. Sin embargo, esta tecnología también tiene el potencial de ser adictiva y puede tener un impacto negativo en la salud mental y emocional de los menores.

 

Algunos estudios afirman que, a raíz del confinamiento de 2020, muchos niños tienen más dependencia a las redes, ya que la pandemia les dejó encerrados en sus casas cuando aún eran muy pequeños. Algunos padres, afirman que no sabían cómo entretener a sus hijos durante tanto tiempo y por ello recurren a dejarles el móvil con Youtube o Tik tok, para que así puedan ver videos de su interés y se mantuvieran entretenidos.

 

Una de las razones por las cuales los menores son más susceptibles a la adicción a las redes sociales es porque todavía están en una etapa de desarrollo emocional y psicológico. La necesidad de aceptación y pertenencia es particularmente fuerte en la adolescencia, y las redes sociales pueden ofrecer una forma rápida y fácil de sentirse conectado con otros. Sin embargo, también puede crear una presión constante para mantenerse al día con los amigos y seguidores, lo que puede ser estresante y agotador.

 

Es importante que los padres y cuidadores estén conscientes de los riesgos de la adicción a las redes sociales y tomen medidas para proteger a los menores. Una de las medidas más importantes que se pueden tomar es limitar el tiempo que los menores pasan en las redes sociales. Los padres tambien tienen acceso a las aplicaciones de control parental, pudiendo de esta manera restringir el tiempo que pasa su hijo en ciertas aplicaciones, que contenidos no debe ver, geolocalizarlos, entre muchas otras funciones.

 

También es importante educar a los menores sobre cómo usar las redes sociales de manera segura y saludable. Esto puede incluir enseñarles a identificar la intimidación y el acoso en línea y proporcionarles estrategias para lidiar con estas situaciones. Anteponer los momentos de ocio familiar a la digital y usar de manera responsable la Red.

 

La escuela también debe dar ejemplo y acompañar a los menores a que hagan un uso seguro de la red, pudiendo hacer actividades lúdicas sobre el uso seguro y proporcionando recursos para la familia y facilitar así la concienciación al menor.

 

En conclusión, la adicción de los menores a las redes sociales es un problema real y serio que requiere atención y acción. Es importante que los padres y cuidadores estén conscientes de los riesgos y tomen medidas para proteger a los menores. La educación y el fomento de actividades alternativas son medidas clave para ayudar a los menores a desarrollar hábitos saludables y equilibrados en relación con las redes sociales.

 

Inés Ojea Hernández

Ines.ojea@alu.uclm.es

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